Después de unos cuantos meses de inactividad vuelvo a retomar la escritura con ganas, actualmente estoy trabajando en un nuevo proyecto de un servicio B2B en modo SaaS en un sector de IT aún incipiente. Después de analizar varios modelos de negocio de aplicaciones empresariales más establecidas como son ERPs o CRM, sigo pensando que existe una tendencia hacia la comoditización de este tipo de servicio en dos sentidos:
1) El mercado es cada vez más oferente, la oferta de productos de este tipo se han multiplicado principalmente por la introducción de la red dentro del canal de distribución de software (tanto directo com o indirecto).
2) La irrupción de soluciones OpenSource hacen que éstas y sus clones aumenten el abanico de productos con características similares.
Esta situación combinada con una mayor presión competitiva de las empresas sumado a la incertidumbre del entorno económico, traducido a euros una necesidad de optimización de recursos financieros y una necesidad en la disminución de riesgos, parece que nos lleva a la aplicación de nuevas fórmulas más eficientes en coste y con menores barreras de salida.
Posiblemente la solución al tema sea la búsqueda de economías de escala en la explotación de la infraestructura de sistemas de información mediante la compartición de costes, se puede entender esta afirmación como algo transversal dentro de la propia empresa como algo más genérico o trans-empresarial como una plataforma tecnológica que de servicio a varias empresas.
De la misma forma la optimización en la asignación de recursos humanos de IT a las necesidades del negocio debe ser más eficiente, punto al que se podría llegar mediante la compartición de personas en estas actividades.
Los dos elementos mencionados, la economía de escala en infraestructura y en personas nos hace mirar hacia plataformas compartidas, llámese cloud computing, software as a service o similares.
A todos CIOs o personal de TI que puedan sentirse afectados por este post yo les plantearía la situación expresada en otro contexto de nuestro día a día, exagerando un poco, nadie pensaría en estudiar derecho porque tiene un juicio o ponerse a perforar el suelo porque tiene que echar gasolina en el coche.
Por esta razón la comoditización y la eficiencia en los factores productivos parece que empiezan a apoyar el outsourcing en modelos mucho más radicales de los que normalmente manejamos, porque en definitiva, nadie compra software sino una solución a un problema operativo de su negocio.